Una vez nos hemos decidido por algo, buscamos los títulos más recientes del género en cuestión. Aquí es donde entra en juego la portada, uno de los elementos fundamentales de un libro. Llegas a tu establecimiento, sea físico o no, y lo primero que ves es una imagen en la que aparece superpuesta bien un sintagma o una frase. A continuación, tomamos el ejemplar y le damos la vuelta. ¿Qué vemos? Una contraportada que muestra la sinopsis del libro: qué sucede, dónde se emplaza, qué mueve a los personajes a actuar. De esta forma, el lector se sitúa en la entrada de lo que el autor ha querido transmitir con su escrito.
Antiguamente, la portada de los libros era de color uniforme. Aparecía, como es normal, el nombre del autor y el título, pero no había mucho más. Con esta simple elección se dieron a conocer obras famosísimas en el panorama de la literatura internacional, hoy día conocidos como "clásicos". ¿La causa? Los medios disponibles en reprografía no eran ni la quinta parte de lo que tenemos en la actualidad. Con esto que se ve bajo estas líneas se apañaban entonces:
Portada de la primera edición de Grandes Esperanzas, de Charles Dickens. Imagen obtenida de http://es.wikipedia.org |
Así puede permitirse lucir Ilíada sin que se cuestione su calidad. Imagen obtenida de http://www.mercadolibre.com.ar |
Yo soy de portada. Para coger un libro tiene que llamarme la imagen que me enseña. Entonces ya me acercaré a leer la portada.
ResponderEliminarMuy buena entrada.
Desde luego que el aspecto visual dice mucho de cara a ir a por un libro. Siempre llama la atención.
EliminarSaludos.
Yo pienso que todo depende del libro también... Sea cual sea el aspecto que se realza -portada o contraportada-, seguro que contribuyen a la impresión que se quiere dar del libro. Y luego estamos nosotros, para tratar de ver más allá del exterior ateniéndonos a lo poco que se nos muestra.
ResponderEliminar¡Bonita entrada!
Sí, el libro suele decir mucho también por sí mismo. Sus otros elementos están para atraer nada más. Y luego, como dices, está nuestra decisión: la que hace que un ejemplar se quede donde estaba o no.
Eliminar:)
A mi parecer; pienso que sin una buena portada da igual la sinopsis, pues nadie va a pararse a leer algo que de buenas a primeras no le a gustado. Al igual que las personas, los libros también causan una primera impresión, y si no te atrae su envoltorio nada más verlo, no vas a querer continuar con el proceso.
ResponderEliminarSe intenta evitar juzgar, obviamente, pero en la actualidad vende mucho más una portada comercial que el contenido del libro.
El impacto que causa una portada es importante, es cierto. El dejarse llevar por lo visual y el decorado del libro ayuda a elegir y a descartar. Pero eso sí, por otro lado no hay que dejar de lado la historia que esconde.
Eliminar¡Gracias por pasarte! :)