Saber de donde venimos nos ayuda a comprender nuestro pasado. La lengua española no es ajena a esta circunstancia y, con ello, alberga una historia alucinante entre vocablos y expresiones. Aquí mis impresiones del libro.
Destacaría el fabuloso rigor en el aspecto de la documentación. El autor va detallando con claridad las fuentes a las que recurre y precisa la información de forma nítida, de forma que se entienda sin problemas. Tanto el estilo de narración como la información expuesta son muy profesionales, lo que facilitará la lectura y comprensión.
El libro es un paseo por hechos y personas que han influido en la historia del español. La variedad al respecto es bestial y deja ver que la influencia de gente archiconocida y anónima puede estar a la par. Este aspecto recuerda a que todos somos humanos y, por tanto, iguales en muchas cosas. Migraciones, normas oficiales... Un menú tremendo que llena y no pesa.
La adición de una sección de personajes determinantes para la época que trata cada capítulo es un detallazo. No deja de ser un tributo a los desconocidos que, desde la sombra, han sido una pieza importante en el desarrollo, creación o primera vez de algún suceso. Lo mejor, que las mujeres, siempre dejadas en segundo plano en asuntos de trascendencia histórica, también intervienen. ¡Y de qué manera!
Los amantes de la etimología estarían asimismo de enhorabuena: el libro contiene la explicación del origen de algunas voces (según época). Procedencia, uso, variedad semántica actual, etc. La palabra se desgrana al máximo y te hace recorrer varios lugares del mundo al mismo tiempo. Imperdible la lista de curiosidades y sorpresas.
En definitiva, La maravillosa historia del español nos lleva a un hilo cronólogico de enormes contrastes y abundante riqueza lingüística que, pesee a lo técnico del texto, hará disfrutar aprendiendo sobre nuestro pasado a la hora de expresarnos... y mucho más.
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