Reseña: «El club del crimen de los jueves»

 

Imagen: www.casadelllibro.es

Si piensas que las residencias de ancianos son un sitio aburrido e invadido por un sentimiento de soledad irremediable, quizá tengas razón, salvo cuando a un grupo le da por meter las narices donde no le llaman y ponen patas arriba todo su mundo.

Lo primero que me ha llamado la atención es la selección de personajes octogenarios, que tanto protagonismo abarcan que varios de los demás resultan prescindibles. Desternillante el hecho de que una pandilla de jubilados se dedique a resolver crímenes y con una soltura digna de los mejores profesionales del sector. Este factor, pese al perfil etario, da un toque de frescura al libro de lo más llamativo.

La novela es un reflejo de la ambición por el poder. A lo largo de la obra, se va desarrollando una trama un tanto oscura, con actitudes poco nobles y con un trasfondo de querer ser más que nadie. Para ello no importa nada ni nadie y el libro lo refleja con una claridad pasmosa. Tampoco tienen desperdicio los recursos que se emplean para luchar contra este mal de principio a fin. Inesperados.

El club del crimen de los jueves resalta asimismo el valor de la experiencia (tan infravalorada habitualmente) a la hora de llevar a cabo una actividad cualquiera. Se demuestra que una edad avanzada no conduce a formar parte del olvido, la inactividad, etc., si te mueves por lo que te gusta. Estos octogenarios no entienden de esa actitud y lo manifestarán sin tapujos. No deja de ser un mensaje para quienes no valoran lo que los años aportan a uno mismo.

Los giros en la historia son magníficos y esta te despista mucho a la hora de dar con la persona culpable de turno. Varios de los personajes secundarios, en consecuencia, tendrán un papel importante en momentos determinados. Lo mejor es que existen varios contrastes entre ellos a pesar de estar en el mismo saco, que ayuda a que la madeja sea aún más compleja de desenmarañar.

Con la originalidad por bandera, sorpresas a cada paso y una sombra de incertidumbre permanente, el autor ha construido una novela (inicio de saga) que no dejará indiferente ni al lector más joven en un mundo donde los ancianos también cuentan (y mucho, como siempre debe ser).